Sunday 26 August 2007

Comida, Sueño, Sexo y ¿Bush? Amen.

Abri esta manana el periodico para leer un riviu del muy comentado librito de David Brooks "The Political Brain; The role of emotion in deciding the fate of a Nation" intentando decidir si sacar los 27 dolares de un bolsillo cada vez mas ligero. Segun los runrunes, el autor logra argumentar lo que varios especialistas en ciencias politicas han estado tratar de verbalizar desde el nacimiento de la republica. Dicese, no solo merecemos el politico que tenemos, sino que buscamos la retorica que nos fuerza a tomar las malas decisiones que parece que los pueblos tienden a tomar. Dame un Mr. Danger sobre un Obama, por favor. Y ni hablar de la America Latina, eso tomaria una compilacion enciclopedica de decisiones imbeciles.


No es, parece, un libro que acusa al 'average joe' de idiota, el pueblo como una masa decerebrada que se equivoca. Por lo menos en este sistema de dos partidos que compone el estrato politico de los EEUU, es una improbabilidad algebraica de mas errores que aciertos. La politica no es un casino, pero entonces ¿que?


El cuento es el siguiente: la retórica visceral de la derecha americana es inmensamente mas efectiva que el frio racionalismo del demócrata. Los numeros azules tienen mas sentido, y las explicaciones de sus proponentes intentan relacionarse con todos, vengan palabras vacias, maria conciliadora. Es pura mierda lo que queremos comer porque, sencillamente, los rojos y los azules se las juegan distinto.


La máquina retórica de la derecha, parece, intenta (y al parecer, triunfa) ganarse algún aspecto del pensamiento irracional, y lo hace por medios de comunicacion formal.

Enter away message text here.

Este articulillo, que me imagino sera la cobija de mucho pescado mañana en la mañana, me hizo clic como pocas cosas habian avanzado una reflexión hacia tiempo. Mi propuesta es una extension de la tésis de Brooks hacia los sistemas que han gobernado las sociedades humanas hace milenios (vease, los rituales comunales en los estudios de Emile Durkheim, los sistemas religiosos, nazismo...) He aqui mi extension: debe haber una capacidad cognitiva y un sistema neurológico que predispone las muestras de fé, las creencias. Kant se equivocó, y Hume se pasó de precavido.


También explica la extrañísima coexistencia del ser racional con el ser religioso, la existencia de cultos, cienciologos - no es solo el deseo a participar en un grupo, es una habilidad de seccionar tipos distintos de cognición, y mientras otros tipos de disonancia racional incitan balance y congruencia, el cerebro pasional es como el tupperware. Y en todo aquello que llama a las pasiones, el area nebulosa que el autor llama 'emocional' - y yo considero menos emocional y más pasional per se (en la mayoría de los casos, muchísimo mas poblados de hormonas y neurotransmisores emocionales) pueden ser responsables por el juicio moral, y muchos de los fenómenos sociales mas inexplicables. Jesús, Chávez o como se le quiera poner.


Ahora necesito leer mucha neurociencia.

Amen.